«EL MARIDO DE LA PELUQUERA» o cuando los sueños se hacen realidad

EL MARIDO DE LA PELUQUERA

Sirvan estos primeros acordes de la estupenda canción de Pedro Guerra, como el comienzo perfecto para este manojo de sueños/reflexiones/recuerdos  sobre una película importante en mi vida “EL MARIDO DE LA PELUQUERA (LE MARI DE LA COIFFEUSE)” P. Leconte 1990.

«De niño bailaba canciones del moro,

el baile venía de adentro y así se inventaban los modos.

De niño soñaba olores profundos,
las mezclas de espuma, colonia
y sudor de unos pechos desnudos.
Creció con su sueño y un día le dijo:
Acabo de verte y ya sé que nací pa’ casarme contigo.
Matilde mi vida, Matilde mi estrella,
le dijo que si nos casamos Antoine y bailó para ella.

Y abrázame fuerte que no pueda respirar,
tengo miedo de que un día
ya no quiera bailar conmigo nunca más»

Cierto es que hay cosas de esta vida que te dejan huella, y no tienen porqué ser especialmente importantes ni dramáticas ni felices ni todo lo contrario, simplemente que “te tocan” Y esto es lo que puedo decir de mi relación con esta película.

Me tengo que ir hasta mediados/finales de los 90, cuando trabajaba en bares y hoteles de Alicante en verano para poder pagarme la carrera de Ciencias Políticas que cursaba en la Universidad de Granada. Eran jornadas maratonianas de trabajo, desde la nueve de la mañana hasta las dos o las tres de la madrugada, de lunes a domingo sin tregua. A pesar del cansancio, mi inquietud me llevaba a arañar más horas al sueño leyendo, siempre leyendo, o viendo alguna película que La 2 daba de madrugada. Y así fue como ví por primera vez “El marido de la peluquera”. No sabía nada de ella, pero me quedé enganchado en esa maravillosa historia. Sueños de infancia que se cumplen, la fuerza de la convicción, el alcance de la felicidad deseada, querer parar el tiempo para que no acabe lo bueno, ….grandes temas que a todos/as nos han tocado de una u otra forma.

Pasado el tiempo, un día en un bar y en unas condiciones digamos “tristes”, escuchar al fondo la canción de Pedro Guerra, me hizo derramar unas lágrimas y, creo, me ayudó a superar esa nube que se cernía sobre mi cabeza.

Ni que decir tiene que no he vuelto a mirar de la misma forma a las peluqueras desde entonces

TÚ NO TIENES ALMA

ImageMe gustaría poder mirarte a los ojos y decirte que no tienes alma, que eres un cobarde excusándote en vaguedades para tomar medidas que hacen sufrir a las personas que un día confiaron en ti, votándote. La primera premisa, el primer mandamiento por encima de todo de un gobernante es estar al servicio de su pueblo, pero tu no lo estás haciendo. Deberías dar prioridad absoluta a los derechos de las personas, mucho antes que seguir los dictados de tus compañeros de partido o tu propio interés particular o partidista.

Una vez que has llegado a tu puesto de poder se te han olvidado de repente las promesas que has hecho durante años; esos principios éticos inamovibles que tenías, han desaparecido y no has dudado en colocar a los tuyos en puestos de privilegio ¿No se te cae la cara de vergüenza de defender lo indefendible, de no asumir tu desfachatez, de echar balones fuera o ir acusando a los demás?

Pero el colmo son esas medidas antisociales, antipersonas, que estás tomando, las mismas que antes condenabas encabezando manifestaciones y pancartas. Te has puesto un sueldazo sin importarte el estado real de la gente que vive a tu lado, en tu ciudad, en tu barrio, y sin embargo no te tiembla el pulso a la hora de subir impuestos, aún a sabiendas de la complicada situación en que dejas a muchas familias.

Has hecho de la política tu forma de vida, vives a costa del dinero de los demás pero no para hacer una labor de servicio público, si no para tu propio provecho y el de los tuyos. Poco te importa incumplir las promesas electorales en forma de puestos de trabajo y de proyectos que jamás verán la luz. Sabes como va esto  y no dudas en aprovecharte del conformismo de la gente y de la pericia de los que, como tú, lleváis mucho tiempo viviendo de esto y sabéis qué hacer, cuando, a quién tocar, a quién engañar, para seguir en vuestras cómodas poltronas. Qué pena que tu indudable inteligencia esté solo al servicio del interés particular egoísta, en lugar de usarse para el bien común. De todos modos, no te las prometas tan felices porque siguen existiendo conciencias críticas , pocas hoy pero muchas más cada día, para denunciar tus abusos e intentar que el mentir tan descaradamente no te salga gratis, sino que ajustes cuentas y responsabilidades con la ciudadanía a la que te debes.

¿QUIEN QUIERE QUE VUELVA EL TREN A NUESTRA TIERRA?

Vivo en una tierra olvidada y marginada por los distintos poderes públicos (excepto en época de elecciones, claro), al igual que debe ocurrir en otras muchas zonas. Por eso, cualquier opción de contar con infraestructuras es una esperanza. El caso concreto de la vuelta del tren es de los más claros, viables, recomendados, ….pero, incomprensiblemente, carece del apoyo institucional y social requerido.

¿Quien está pidiendo que el tren vuelva a Baza?¿Quien está trabajando lo indecible para lograr este anhelo? ¿Quien está luchando de las más variopintas formas ante gobernantes y sociedad en general para materializar esta esperanza de futuro? Puede que sea algún “lobby” ferroviario con intereses particulares, o quizás sea un grupo de que busca enchufar aquí a familiares y amigos, o pudiera darse el caso de resultar unos “iluminaos” que han visto la luz y escuchan voces en su cabeza,….Que va, mucho más simple, se trata de algunos colectivos (como el Partido Andalucista) y de personas a título individual, que llevan practicamente desde el cierre de la línea férrea Guadix-Baza-Almendricos pidiendo su reapertura, considerando (como demuestran estudios y la experiencia de otros territorios) las bondades de este retorno en materia de creación de empleo, de aumento en los niveles empresariales y mercantiles, de mejora de las comunicaciones y de aumento de la calidad de vida en la zona, entre otras cuestiones. Es en definitiva, máxime después de la fusión en la plataforma “Ciudadanos por el Tren”, una demanda ciudadana, un grito de auxilio, que trata de hacer frente a la cortedad de miras de unos goberbantes europeos, españoles y andaluces que siguen marginando a nuestras comarcas, y a la vez, al inmovilismo de una sociedad asqueada de todo lo que huela a “político” y desmovilizada por los propios intereses de los partidos en el poder.
Son tantos elementos en contra de una de las iniciativas más limpias, honestas, desinteresadas y buscadoras del bien comun que yo conozco, que hay que aprovechar cualquier brecha en el muro de la indiferencia para hacer llegar que tenemos una oportunidad,ya sea en un mercado semanal, en un evento deportivo, en un acto reivindicativo cada 31 de Diciembre, o por qué no en la cabalgata de la noche de Reyes, como ha ocurrido gratamente este 5 de enero en la Plaza Mayor bastetana.
No podemos cortarnos las alas nosostros mismos, colocar prejuicios ni autoponernos barreras, porque de eso llevan muchos años aprovechándose los malos gobernantes para seguir ignorándonos. ¿Que quien quiere que el tren vuelva a Baza? Pues debiera ser Baza entera porque está claro que es posible, que hay al menos una esperanza de salir adelante, que puede venir por carretera desde el Almanzora o por los railes del tren.

CXT en aniversario de Indiana Jones

SED BIENVENIDOS/AS AL BLOG DEL GUERRERO DEL NORTE (BASTETANO)

Muy buenas, sed bienvenidos/as al blog del Guerrero del Norte (Bastetano) nombre quizás algo pretencioso, y que responde al apelativo que me dieron hace un par de años unos compañeros: «Chiquillo, es que no paras, qué energía y  qué genio gastas; Antonio, eres  el guerrero del norte».
Las siguientes propuestas no tratan sino reflejar inquietudes, deseos, propuestas, denuncias, reivindicaciones, opiniones, etc….. sobre todo los que nos rodea en el altiplano de Granada, en las comarcas orientales andaluzas, en Andalucía entera y, por qué no, en cualquier otro lugar y/o circunstancia en la que se pueda estar, pensar o soñar.
Vaya por delante mi espíritu inquieto e inconformista, muy reivindicativo, porque creo que la sociedad que vivimos necesita menos resignación, de la mucha que tiene, y más reclamación ciudadana, de la poca que existe.

Señal Tren en vía verde