La leyenda del fantasma de la estación de tren de Baza

Nieve en la antigua estación de tren de Baza AAFCB

Una chica joven vestida de blanco se aparece en la ventana de la esquina superior derecha de la antigua estación bastetana, tan solo los días en los que nieva sobre la estación. Cuentan que Baza permaneció en el bando republicano en la Guerra Civil Española prácticamente hasta el final de la guerra. Iniciado el año 1939, hubo un intento desesperado de ofensiva desde esta zona, para lo cual llegó a Baza el mítico capitán Izaguirre, que se instaló en las dependencias de la estación de ferrocarril. Durante su estancia aquí, la hija del jefe de estación y el militar vivieron una apasionada historia de amor, hasta el punto de que decidieron casarse. El día previsto para la boda se produjo un ataque del bando nacional, de tales proporciones que obligó a una retirada total de los militares fieles a la República. En la estación de ferrocarril, con el tren a punto de salir, el capitán Izaguirre esperaba a pie de vagón a su prometida vestida de novia. Pero ella nunca llegó a coger aquel tren. Le atravesó el corazón una bala perdida disparada por la avanzadilla nacional, en el momento en el que se asomaba a la ventana para decirle a su prometido que la esperara. Las gotas de sangre de la novia se unieron a sus lágrimas por saberse muerta, y la mezcla se diluía entre la copiosa nevada que azotaba la ciudad. El capitán dejó el tren y fue en busca de su amada, pero fue acribillado de manera inmisericorde por sus enemigos. Consiguió llegar bajo la ventana y ella, en su último suspiro de vida, se arrojó desde arriba para caer junto a su amado, muriendo ambos abrazados.

Desde entonces, cuentan que los días de nevada intensa puede verse a la novia vestida de blanco mirando desde la ventana, alzando sus brazos a modo de plegaria inútil para cambiar su fatal destino.

***Esta leyenda se encuenta recogida en la novela «No LLegarás a Cascamorras», de Antonio Fco. Martínez.