30 años sin el tren son demasiados

Dice el famoso tango de Carlos Gardel que “20 años no es nada”; aquí llevamos 30 años sin tren y está siendo demasiado. Cuando el 31 de diciembre del año 1984 nos cerraron la línea férrea Guadix-Almendricos, no solo nos quitaron un medio de transporte fundamental para comarcas como las de Baza, Huéscar, Los Vélez o el Almanzora, sino que nos cerraron de un portazo las posibilidades de modernización para toda nuestra zona.

“Es una línea deficitaria”, nos justificaron con la boca chica desde Madrid, cuando en realidad había decenas y centenas de líneas igual o más deficitarias que la nuestra, pero que jamás se cerraron. Había que ver a las miles de personas manifestándose en Barcelona, Madrid o en Bilbao para que esto no sucediese……, y no sucedió. Aquí, apenas varias decenas entre zagales y adultos, que nos echamos a las vías para tratar de detener una decisión injusta, pero que de poco sirvió puesto que la suerte estaba echada desde hace tiempo. Una vez más llegamos tarde, una vez más perdimos el tren. Otra vez más y van demasiadas en estas últimas tres décadas. El coraje de las discusiones al calor de la mesa de camilla o de la barra del bar, quedan en nada en esta Baza nuestra demasiado sumisa a la hora de acudir a las urnas, y peor aún, a la hora de reivindicar lo que nos corresponde en las calles, plazas o donde sea.

Triste 30 aniversario, conmemorando que nos dejaron más solos que la una, más incomunicados, más condenados al paro y al subdesarrollo, más tristes, más feos, peores. Pero no todo puede ser malo: recordamos al tren que nos quitaron, pero también lo hacemos de aquellas personas que se echaron a las vías hace 30 años, creyendo ilusamente que podríamos parar lo imparable; lo hicimos tarde pero lo hicimos y eso no debe pasar sin pena ni gloria, una página más que pasamos y se olvida para siempre. Niños, jóvenes y mayores,  ignorados ayer  y que homenajeamos hoy como se merecen. Son todo un símbolo de luchar por lo nuestro en una época en la que no era fácil hacerlo, con el miedo a la represión aún a flor de piel; hoy sin embargo, supuestamente con todas las libertades y garantías, se prefiere ver los toros desde la barrera, nadar y guardar la ropa, tranquilo no te pongas nervioso, tranquilo majete en tu sillón. Contradicciones de esta vida loca,  loca, loca y su loca realidad, y sin embargo la llama de la reivindicación por el tren ha seguido por la pelea de unos pocos / algunos / quizás muchos a los que no nos ha importado que nos tratasen de ilusos,  de iluminados, de ir contracorriente porque sabían / sabíamos que la razón estaba y está de nuestro lado.

Podríamos señalar las mil y una razones que aconsejan la vuelta del tren, los mil y un informes que justifican su reapertura, la Justicia Social que debe tocarnos algún día,…y estaríamos aquí varios días. Pero valga un solo dato: si hasta desde Bruselas, empresarios que no tienen precisamente ánimos altruistas, han señalado a la línea férrea Guadix-Baza-Almanzora-Lorca  como una de las más rentables y viables de todo el Corredor Ferroviario Mediterráneo, ¿qué diablos hacemos aquí todavía sin tren?

CXT 30 años sin tren